Hay que prohibir el indulto
Si a los toreros les da pereza entrar a matar, como a Rubén Pinar, y a los ganaderos no les importa hacer el ridículo, como…

Si a los toreros les da pereza entrar a matar, como a Rubén Pinar, y a los ganaderos no les importa hacer el ridículo, como a Victorino Martín, y los aficionados no son capaces de analizar lo que están viendo en el ruedo, a los toros no hace falta que los prohíban: ya están muertos. Cada toro que sobrevive injustamente a la suerte suprema es un paso más hacia la abolición. El camino que se recorre lentamente hacia el final de la tauromaquia consiste en ir perdonando la vida a toros que no pasar
Para seguir leyendo, hazte Premium
¿Ya eres Premium? Inicia sesión
Mensual
primer mes
y después 7,99 €
Anual
4 meses gratis
Gratis 1 año de Legálitas Estándar (valorado en 240€)
Conforme a los criterios de